miércoles, 23 de mayo de 2012

esa era mi amiga?


No hace mucho me escribe una amiga de hace tieeempo. Fue mi primera mejor amiga. Nos hicimos compinches en tercer grado del colegio y éramos inseparables (de esas insoportables luego porque todo hacíamos juntas), éramos familia. Después con el tiempo y la boludez adolescente yo me enojé con ella y nunca más hablamos, bueno, sí hablamos, pero nunca más fue como antes. Yo era ñembo malita en el colegio y ella, bueno, la verdad que mi egocentrismo no me permitió fijarme mucho en qué anduvo ella durante esos años, imagino que lidiando con sus hormonas como yo. El punto es que me escribió para hacer algo, salir a tomar algo, ponernos al día, lo que sea. La salida no se dio, los horarios no se ponen de acuerdo.
Esa aparición me hizo acordar de miles de pendejadas que hacíamos juntas, nos divertíamos y sufríamos por cosas tan insignificantes. Pasaron los años, muuuuuchos años, más de diez años y a veces la vida hace que nos encontremos de forma casual, siempre que nos vemos nos hacemos fiesta y siempre planeamos reuniones que nunca cumplimos. Parece que cuando te ponés vieja te ponés sentimental sobretodo con cosas como amistades de infancia. Realmente pegaría concretar alguna vez las charlas/chismes que nos debemos.
Anoche, como todo domingo paria, Facebook, ruedita del mouse corriendo, viendo cuánto más vida tiene la gente que yo, me topé con una foto del rostro de mi amiga. El retrato era precioso, lo había tomado uno de mis fotógrafos favoritos de acá. Entonces le dí click y empecé a chusmear el álbum. Casi me desmayé cuando vi el resto de las fotos, la chica, mi amiga, mi compañera de colegio, o sea mi contempo, salía en cada foto mejor que en la anterior, hasta que llegué a unas en las que posa en ropa interior y ahí ya quise tirar la computadora, previa llamada a todas mis amigas para que compartan mi sentimiento de hechaputez al lado de alguien tan diosa a nuestra edad.
Puede ser sana la envidia? O es vergüenza esto que se siente? Estamos en esa edad en la que ya se nota quién está bien deteriorada y quien se conserva super bien? Ya llegamos a esa edad? Por qué nadie me avisó?!
Mentira, hubo señales que pasamos por alto. Me acuerdo que terminamos el colegio y nos fuimos de viaje de fin de año a la playa. No sé si era mi mejor momento de esbeltez pero ciertamente era la mitad de lo que soy ahora. Pero haciendo memoria, me viene la imagen de mi amiga y los cuadraditos en su panza, una cosa de locos el cuerazo que se mandaba. Imagínense que en esa época la situación de las demás al lado de ella ya era semi-desastrosa, Y ESO QUE TENÍAMOS 17 AÑOS! Debo haberme preguntado en ese momento por qué miércoles no seguí siendo su amiga o por lo menos su compañera de gimnasio. Será que a estas alturas iba a estar así?! Será? Será? 

no sos la misma


Llega cierta edad en la que ya no sos la de antes.
Farrear y enganchar el laburo definitivamente no es una opción. Es más, farrear fuerte sábado luego ya no es tan buena idea porque una resaca puede llegar a durar tranquilamente más de 24 horas.
No, no sos la misma. Comer comida chatarra te cae más pesado que antes. Bailar dos horas de seguido ponen de huelga a tus rodillas al día siguiente. Quedarte viendo una serie hasta las 2 am anulan tu capacidad de concentración al día siguiente.
Entonces, te ponés a evaluar tu rutina y te das cuenta que por más que desde los quince estuviste mamando consejos de salud y belleza, nunca pero NUNCA hiciste caso a ninguno. O bueno, a lo mejor sí hiciste caso. Te compraste cremas hidratantes, antiestrías, cremas mágicas que utilizaste exactamente durante dos semanas. Empezaste el gym, pagaste una cuota altísima y fuiste tres veces. Te volviste vegetariana, eeeeh, solo durante un almuerzo de un día. Entonces “cumpliste” pero no cumpliste un carajo porque en realidad ni siquiera a medias cumpliste.
Esto no solo pasa por la gordura. Pasa por mil aspectos. La piel, el pelo, la agilidad, la flexibilidad, el aguante, el arranque, el abrir los ojos para despertarse y empezar el día, el conciliar el sueño por las noches.
Todo va adquiriendo una maña nueva. Nada sale automáticamente como antes. Ya no sos la misma.